Cuando es noche cerrada, tú.
Cuando las olas golpean incansables, tú.
En el crepúsculo, frente al sol, tú.
Tomas mi mano y me iluminas, me conduces a la sabiduría, a
la paz y si necesario fuera también a la guerra. Tú ama, la que siempre ha
estado ahí, antes de las eras y de los tiempos, tú.
Señora azul, estrella guía, por encima de los cielos, entre
los saltos de las olas.
Tú la luz, tú la fuerza, tú mi yo y mi tú, juntas, juntas, desde siempre, cuidando, acariciando, abrazando fuerte el
timón frente los temporales, los de ultramar, los esperados y los desesperados,
los del hogar.
Aquí y ahora: tú - YO.
¡Qué lindo!
ResponderEliminarMi interpretación: tener el control del timón y llegar a buen puerto con la Guía Divina o la Buena estrella.
Besos
Tu interpretación es perfecta, que la estrella nos guíe.
EliminarUn abrazo
Hola Ishtar!! Cuando pienso en lo que me gustaría tener cuando se acerquen mis últimos días, siempre me pregunto en quién me recordará y de qué modo. Algo así sería perfecto para cualquiera. Y justifica y edulcora todas las vicisitudes vitales pasadas. Grandes sentimientos te adornan y gran persona te inspira. Enhorabuena!!
ResponderEliminarUn beso :)
Solas nacemos y solas morimos, en el camino hay momentos de todo tipo, cuando el sendero se pone angosto lo mejor es avanzar por tu cuenta.
EliminarAbrazoxxX
¡Ah! Querida Ishtar,
ResponderEliminarEstuve en Bilbao en noviembre del año pasado.
Te ubicaba en País Vasco, pero no sabía que estabas tan cerquita,
hubiéramos arreglado un encuentro. (En realidad no fue planeada con anticipación mi vista a la ciudad, más bien sobre la marcha. Y no tenía tu correo electrónico). Para la próxima, entonces... :-)
Besotes